Hay destinos que se descubren y otros que se revelan. Nueva Zelanda pertenece a esta segunda categoría. Dos islas enfrentadas al vacío del Pacífico Sur que acogen algunas de las geografías más espectaculares del planeta: glaciares que descienden hasta la selva, lagos azules imposibles, fiordos infinitos y volcanes humeantes que aún cuentan historias ancestrales.
Nueva Zelanda es la esencia de la aventura controlada, de la naturaleza desbordada, de la hospitalidad auténtica. Un destino donde el lujo no se mide en superficies doradas, sino en la inmensidad, la privacidad y la conexión con lo esencial.
El clima en Nueva Zelanda es oceánico templado, con estaciones opuestas a las del hemisferio norte. Cada época ofrece una experiencia distinta, pero igualmente fascinante:
Recomendaciones de viaje
Un viaje bien diseñado por Nueva Zelanda debe contemplar ambas islas y al menos dos semanas para saborear su diversidad:
- Isla Norte:
- Auckland y la Bahía de las Islas, para combinar cultura, navegación y paisajes costeros.
- Rotorua, el corazón geotermal y espiritual del país.
- Hobbiton, una visita privada al set original de El Señor de los Anillos, más allá del turismo convencional.
- Waiheke Island, la isla del vino y el arte contemporáneo, a 30 minutos en helicóptero desde Auckland.
- Isla Sur:
- Queenstown, capital del lujo activo y el punto de partida hacia los Alpes del Sur.
- Fiordland National Park, con cruceros boutique por Milford o Doubtful Sound.
- Mount Cook y los lagos glaciares, para caminatas con guías naturalistas y sobrevuelo en helicóptero.
- Marlborough y Central Otago, dos regiones vinícolas de élite con acceso privado a bodegas familiares.
Experiencias únicas
Nueva Zelanda revela su alma a través de vivencias diseñadas para quienes buscan lo remoto, lo auténtico y lo inolvidable.
Alojarse en un lodge de lujo con vistas al lago Wakatipu o a los glaciares, con chef privado y actividades a medida.
Sobrevolar los Alpes del Sur en helicóptero, aterrizando en una cima para un picnic con champagne.
Navegar por los fiordos en un yate privado, pasando la noche a bordo bajo un cielo estrellado.
Encuentro cultural privado con una comunidad maorí, en una ceremonia auténtica y respetuosa.
- Ruta en coche de lujo por la Southern Scenic Route, entre acantilados, playas desiertas y reservas naturales.
Kayak en el Abel Tasman National Park, seguido de una estancia en una villa ecológica frente al mar.
Clase de cocina con un chef local usando ingredientes nativos, como el kawakawa, el venado o el hoki.
Avistamiento de ballenas en Kaikoura o delfines en Bay of Plenty, acompañados por biólogos marinos.
- Noche de astronomía en Tekapo, con telescopio privado en uno de los cielos más limpios del mundo.
- Trekking personalizado por la Routeburn Track o la Tongariro Alpine Crossing, con servicio logístico de lujo.
Combinaciones de viaje
Nueva Zelanda se integra de forma natural en itinerarios de largo recorrido por Oceanía o Asia-Pacífico:
En L’Artisan by MTGlobal, cada viaje a Nueva Zelanda es una exploración consciente: de paisajes intactos, culturas vivas y una hospitalidad que se da sin estridencias. Porque hay lugares que no solo se recorren, sino que nos invitan a habitar un mundo nuevo, donde lo extraordinario sucede sin previo aviso.